
Y si a un hijo de inmigrantes como yo esto es lo que le desea la "Revolución Bonita" se podria decir definitivamente que el sentimiento es mutuo.
Imagen cortesía de Caga'e país.
Pensamientos irreflexivos de un obstinado que odia a la humanidad
y tiene muy mala ortografía
"—¿Qué compraste en la última mano? —preguntó Crane.
—Suerte —dijo Ozzie—"
El mito del Rey Pescador re-interpretado en clave de póquer con Las Vegas como especie de Monte Olimpo de arquetipicos dioses representados en las cartas del tarot.
Supongo que esa es la idea base del libro: el mafioso Bugsy Siegel, uno de los creadores de Las Vegas fue en realidad una re-encarnación del Rey Pescador, avatar de Dionisios, Osiris, Jesús y cualquier dios que haya muerto para resucitar, destronado por Georges Leon, quien para ser inmortal necesita trasladar su alma a distintos cuerpos que compra en una partida de poker llamada Asunción, la partida se lleva a cabo cada veinte años, años que son necesarios para que la compra anterior madure y poder realizar la toma de posesión de los incautos. Justo en este momento, cuando el Rey se dedica a pescar cuerpos, aparecen los Jacks (las jotas de la baraja) como aspirantes al trono que lo intentan derrocar. Aquí entra Scott Crane, hijo de Georges, quien junto con su vecino Mavranos y su padre adoptivo Ozzie, intentan salvar sus vidas y la de su hermana adoptiva Diana, candidata a Reina (avatar de Isis, Diosa Madre, Demeter).
Suena algo complicado y en realidad lo es, todos esos detalles del mito y las relaciones con las cartas y los juegos de azar se van descubriendo poco a poco, con bastante esfuerzo del lector quien además debe descubrir como Georges pasa de un cuerpo a otro cambiando de nombres y personalidades pero aderezado con algo que me pareció fascinante; las supersticiones, tan comunes en los jugadores, vistas como ritos mágicos de poder y defensa ante dioses y entidades del azar y el caos, los mismos que controlan las cartas y el juego. El tarot (y su heredero, el juego de cartas moderno) y el póquer como representaciones de los individuos que manejan y usan esas cartas. Todo conectado y todo representado en los naipes.
Muy buena novela en mi opinión más controlada y mejor construida que la famosa y desbocada Las puertas de Anubis, aunque comparten ese manejo "racional" de la magia que acostumbra a usar Powers.
historia cursis de porq soy burro en ciencias naturales y biologia
Es que no se me ocurre como el ser un burro en lo que recuerdo quizás eran las asignaturas mas faciles del colegio necesite una razón cursi ¿Amores estudiantiles no correspondidos por un compañer@? ¿Por un maestro? ¿Por qué nada más historias cursis relacionadas con esas asignaturas y no con matemáticas o física?
Y además, otro alguien también desea saber:
¿de que habla la era cenozoica?
La verdad es que no se de que podría hablar la Era Cenozoica si acaso hablara, supongo que de la mala leche de que una eventual piedrita espacial causara el fin de los titánicos dinosaurios y su pase a retiro o a lo mejor de su molestia porque una Era tan pequeñita y modesta como la del Cuaternario le haya quitado importancia con esos advenedizos practicamente insignificantes que son los mamíferos.
Septimus: —Hay cuatro brujas. Has lo que te digo y quizás tengamos un chance
Tristán: —Espera ¿Como se que puedo confiar en ti?
Septimus: —No sabes ¿Por qué? ¿Tienes otra opción?
Tristán: —No
Septimus: —Entonces ¡Adelante!
Tristán es un joven inteligente, gallardo y pobre, está enamorado, la verdad es que está enamorado solo, y como muestra de su "profundo y eterno" amor de cuasiadolescente por Victoria, una vecina del pueblo, le ofrece ir hasta el sitio donde cayó una estrella y traerle una parte de la misma.
El problema es que Tristan vive en la Inglaterra del siglo XIX, en un pueblo llamado Wall donde -como en buen pueblo inglés del siglo XIX que se respete- un muro lo separa de un mundo paralelo de magia y fantasía; el reino de Stormhold, un reino donde su rey acaba de morir dejando como misión a sus herederos llegar hasta donde la misma estrella cayó y recuperar su medallón para así obtener el trono. Además, competirán con la malvada hechicera Lamia, quien desea el corazón de la estrella para obtener nuevamente la juventud.
Una carrera en un mundo de magos, cazadores de rayos, héroes inocentes, princesas prisioneras, príncipes cínicos y traidores, amores no correspondidos, herederos incógnitos, brujas canallas, piratas trasvestis y todos los clichés del género (bueno, el último quizás no tanto) que se pueda uno imaginar pero maravillosamente bien llevados y presentados en la pantalla. Un típico cuento de hadas inglés, sin necesidad de apoteósicos escenarios y batallas, remozado con toques de cinismo adulto, divertido y emocionante, por supuesto ayudado con las excelentes interpretaciones de esos monstruos como De Niro y Pfieffer, incluso las breves apariciones de O'Toole y Everett.
Excelente film, no se debería dejar pasar.
PD:Una lastima que sea practicamente imposible conseguir un libro de Neil Gaiman en las librerías locales (quizás con el empujón de la película aparezca alguno).